El hospital recibió la autorización en 2016 para llevar a cabo el primer trasplante de este tipo, y había estado esperando desde entonces para encontrar pacientes compatibles.
Cirujanos estadounidenses anunciaron el jueves haber realizado el primer trasplante renal de un donante vivo con VIH a un receptor también con VIH, un avance médico mundial.
El riñón de una mujer con VIH positivo fue transplantado a otra persona con el virus del sida, informaron médicos del hospital de la Universidad Johns Hopkins en Baltimore.
Nina Martínez, de 35 años, donó uno de sus riñones a un receptor anónimo en una operación que se llevó a cabo el lunes.
Martínez inicialmente quería donar un riñón a un amigo, pero después de la muerte de éste se mantuvo como donante para una persona anónima, según el hospital Johns Hopkins.
Hasta ahora los médicos pensaban que era demasiado peligroso dejar a una persona con VIH solo con un riñón.
La decisión de hacer un trasplante demuestra la confianza de los científicos en los medicamentos antirretrovirales actuales, que permiten a los pacientes llevar una vida normal o casi normal.
Dorry Segev, profesor asociado de cirugía en la Escuela de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, estima que entre 500 y 600 personas VIH positivas podrían donar órganos cada año en Estados Unidos.
Hasta ahora solo los órganos extraídos de personas fallecidas con VIH podían ser transplantados.
El receptor del trasplante debe continuar tomando antirretrovirales, al igual que Martínez. «Al sacar a este receptor de la lista (de espera), todos ganan un lugar, tengan VIH o no», dijo la donante al Washington Post.