Águeda Solano
Santo Domingo
Andy Herrera es un niño que, como cualquier otro, tiene muchos deseos de vivir. Sin embargo, sus expectativas de vida no son tan altas como la de un niño común, ya que por haber nacido con una enfermedad cardíaca congénita ha tenido que ser operado cuatro veces a corazón abierto, y en la actualidad necesita un trasplante de corazón y pulmón de urgencia.
Hace diez años Andy no tenía mucha esperanza de vida. La visita de una doctora estadounidense a República Dominicana hizo que el caso fuera conocido en su país, y afortunadamente esta misma cirujana realizó la operación que devolvió la salud al infante en ese momento.
A pesar de que las cirugías realizadas al pequeño, que hoy tiene 13 años de edad, han tenido éxito, en la actualidad su salud se encuentra en estado de deterioro.